y llegó el día

Altavoces en el lago

Una calle principal

Quedan 4 días, 4, ¡para el gran día! Todo está preparado, llevan un año acondicionando la ciudad, asfaltando carreteras, adoquinando las calles y vías principales de la ciudad, terminando edificios y pintando las fachadas, limpiando calles, sustituyendo viejos postes de electricidad... Por supuesto solo en el centro y en las vías principales, pero mejor eso que nada. En el último mes han llenado las calles de carteles con el Tío Ho (Hồ Chí Minh) con niños, el Tío Ho leyendo literatura..., banderas, también de plantas y flores tanto artificiales como frescas, han tapado con paneles gigantes de papel decorados muros de hierro, han terminado de poner los mosaicos al muro del dique (esto ha quedado francamente bonito) y por supuesto, en el centro, han añadido algunas esculturas y pinturas sobre Hanoi. 

El 1 de octubre empezaron la semana de eventos, fuegos artificiales, marchas y marchas militares, de bomberos, de policías, bailes tradicionales, exposiciones sobre la ciudad, etc. 

El otro día coincidí con uno de esos bailes (en la foto) pero estaba cerrado al pueblo, solo los militares y, me imagino que algunos privilegiados, podían sentarse a verlo. "Mis paisanos" y yo nos contentamos con verlo desde la carretera, en moto o de pie.  
Lo de la foto tuvo lugar en la plaza del emperador que os comenté antes. Tomé un vídeo (no logro que baje) para que os hagáis una idea, en cuanto pueda subirlo lo añadiré. ¡Me habría gustado verlo más de cerca! También participó un grupo de chicas que tocaban esos tambores gigantes que veis, fue muy chulo, pero demasiado lejos y demasiado ruido de motores para disfrutarlo bien.

Pues bien, con todo esto pasando, Yo y Scotty nos escapamos ¡y no somos los únicos! Os preguntaréis ¿por qué? ¡una vez en mil años! pues tengo miles de razones, tantas como años tiene la capital. La más importante es que, aún viviendo aquí, ¡no veríamos nada! Va a ser imposible llegar hasta el centro, están cortando las calles, el tráfico es demasiado, demasiada gente...y, si finalmente llegara al lugar del evento, de tanta gente no podría ni ver ni escuchar nada. Lo digo por experiencia, ya nos ha pasado en otras ocasiones y no eran tan importantes como esta. En fin, que me voy a ese pueblo que me gusta y con suerte a ver el mar...volveré el lunes cuando haya pasado todo.

Otro escenario en otra plaza